¿Es competencia una chica preciosa contra una bomba? Creo que sería un enfrentamiento innecesario y de un resultado predecible antes siquiera de comenzar. Segundos después a que una mujer considerada bomba explote, no te quedan más que un puñado de esquirlas desperdigadas por el suelo. Ella estaba y ya no está; perdiste. En cambio, si salís a la vida con vestido de fiesta y zapatillas deportivas…
No importa si escribiste Pure Heroine con menos de 20 años y fue quíntuple disco de platino en tu país. Qué más dá que el mismo disco fuese oro en Gran Bretaña y triple platino en Estados Unidos. Es indiferente que si juntás la cantidad de reproducciones de “Royals”, “Tennis Court” y “Team”, la suma dé más de 900 millones. No importa qué caricia o qué tempestad amorosa se avecine, Lorde bailará encima de una camioneta o en el baño de un boliche mientras su chofer la mira, o un ocurrente pianista le despunta las notas de su más reciente sencillo “Green Light”.
Lorde nos acerca lo primero del futuro Melodrama (2017) y, bastante directo para nuestros sentidos, tenemos una canción de break-up amoroso.
Lorde le pega un poco en los talones a un amor pasado, en busca de la redención de la noche y el escape, aunque éste pueda doler. “Ella piensa que amas la playa / Sos un maldito mentiroso”. Incluso, hasta podría llegar a advertirle de su error. “Esos grandes blancos / Tienen grandes dientes / Espero que te muerdan”. ¿Tiburones blancos? ¿Grandes dientes blancos como esas niñas ricachonas a las que tantas canciones les dedicó con desdén?
“La estoy esperando / Esa luz verde / La quiero”. De la misma manera, esperamos con ansias este nuevo trabajo de larga duración de esta mujer, quien disfruta de su corte nuevo de pelo y un refresh bastante pop/alegre (al menos, en este sencillo), que contrasta de lleno con la amplitud espacial y cadencia melancólica a la que nos tuvo acostumbrados en trabajos anteriores.
Fresco puede ser ese sintetizador, pero las letras pueden tornarse igual o más que interesantes. El tiempo dirá si le lograremos esquivar la mirada a Lorde o no. Ella nunca pensó hacerlo.
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