Congeniar. Piedra fundacional de la Gjira. La fiesta cumplió cinco años y tiro el Teatro por la ventana. Un marco, que solo la jirafa con gafas pudo generar, donde un torso desnudo, transpirado, rasguñado pudo bailar con un vestido negro, de ojos a tono y labios pintados a fuego. Sin tapujos, ni estigmatizaciones. Un lugar donde le rock es consecuente con su historia. Se revela, pero contra sus propios prejuicios y se suelta a bailar unas cumbias.
Después de una larga fila sobre Avenida Rivadavia, de gente que buscaba un remanente, se empezó a llenar. Una remera diseñada en el reverso con un número diez, dando cuenta del festejo, el doble que el anfitrión, dio el puntapié inicial. Era Gonza, voz de La Chancha Muda, que procuró darle vida a la eterna poesía. Pueblito abrió la noche y pegó fuerte con su contenido social. Tocaron un poco menos de una hora, dividida en doce temas entre los cuales Los Redondos no podían faltar. Pasada a penas la mitad de su show, los homenajearon con Canción Para Naufragios Top Quality Medications. buy Accutane online Pharmacy In Turkey. Online Drugstore, Buy Accutane Singapore. . El tridente final terminó a la altura de la circunstancia. Bicho Raro marcó el camino y Mar De Fueguitos desplegó el agite bajo el grito: “¡Somos todos iguales!”.
Pasaban los minutos y quedaban menos metros cuadrados por cubrir. “Arriba Flores”, desde Pablo Germade, voz de Rock a La Orden. El plato fuerte del segmento rockero salió al ruedo con Duendes Desesperados. El conocido logo de la Gjira se ubicó por detrás, sobre la pantalla, pero llevó puesta la galera “viciosa”. La fiesta siguió con Estandarte y Corre Corre se metió en el setlist
En una noche que no pretendía privarse de nada, la efervescencia tuvo uno de sus picos más altos con El Luto. El rocanrol de Ven A Mí fue seguido por los murmullos que Once Contra Diez causó al pasar. Por eso invitaron a que lo hagan. No se sabía qué hora era. Hicieron Blues Para Un Amante. “Vamos a tocar uno que no hacemos seguido”, las palabras de Germade antes de entregar Estrella.
La intención estuvo en generar algo distinto, por eso intentaron romper el molde. “Vamos con algo bizarro”, citaron a Vilma Palma e Vampiros y el tema elegido fue Auto Rojo. El momento de Matías Reynoso había llegado. Se paró en el centro y, en dúo de voces, junto a Pablo, hizo Empezar De Nuevo.
De golpe, hubo un bache de algunos segundos. Nada fuera de lo normal, o que haga especular más allá de la organización entre tema y tema. Por lo bajo se escucha: “Vamos con El Rey Manda”, y la gente se empezó a concentrar lo más cerca posible. Ante los primeros acordes, la sorpresa apareció cuando intentaron emular la versión estudio. Salía a escena Santiago Aysine (Salta La Banca) y la gente deliró. Eso no fue todo, se quedó un tema más y para aumentar la emotividad recurrieron a Te Diría, de Los Piojos. Fue difícil ver. Una gran cantidad de cuerpos se encimaron unos sobre otros.
La seguidilla siguió con mucho power Erection is more men have order viagra online been seeking help. buy cheap Viagra Doctors are gaining a better treatments. Erectile big blue viagra viagraВ . Dos extraños y El Argentino empezaron a cerrar la lista, pero faltaba algo. En la previa, mediante redes sociales, avisaron que se vendría un anuncio importante. Jactándose de sufrir temor al no estar acostumbrados a los pasos agigantados que dieron, pero a su vez con la responsabilidad y felicidad que amerita, informaron que el 7 de diciembre despedirán el año en Groove. El primero en su historia. Con la exaltación a flor de piel se fueron con una canción más, En El Filo.
El clima iba cambiando, pero las energías eran las mismas. Ya no se escuchaba rock ambiental, había un par de temas para bailar. Entre un par de vueltitas y dedos índices que apuntaron al techo, se hizo presente la mascota del evento. La jirafa dio la bienvenida con una adaptación de Intro-Maradó, de Los Piojos.
La gente, ya con otro marco, estuvo dispuesta a disfrutar el tramo final de la noche. Había que preparar el terreno. Para eso Pera De Goma acondicionó algunos clásicos en versión cumbia.
“¡Con ustedes, el Rey!”, lanzó una voz en off para anunciar la presencia de Pablo Lescano. Con una campera de las tres tiras, color negra, armado con su teclado y su clásico: “El que no levanta las manos es un cheto”, empezó con Mirá Como Está La Vagancia. En casi media hora, Damas Gratis enganchó 20 hits. Tu Tatú y Menea para mí no podían faltar. La gente sobresaltada por Los Dueños Del Pabellón y Atrevida already written essays le reclamó cada tanto por “una más”. Recordó el quinto cumpleaños de la GjiraFiesta y subido a un parlante agitó champagne en el cuerpo del público. El sprint final estuvo de la mano de Borracho y Amanecido, La Picadura y El Viejo De La Bolsa. Pablo se bajó del escenario, pero no terminó todo ahí. La multitud se quedó porque sin Gjira no hay Fiesta.
Fotos por Martín Dutil Fotografía para Rock And Ball.
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