Cayendo en la tristeza, más honda y más espesa:
Gustavo Kupinski, o simplemente “Tavo”, fue el guitarrista de Los Piojos desde 1991 hasta la disolución de la banda en 2009. Luego de la separación empezó a colaborar asiduamente con Las Pelotas y formó Revelados junto a otros dos ex Piojos.
El 4 de enero en la Ruta Provincial 63 de Dolores, “Tavo” perdió el control del auto donde viajaba junto a su esposa y sus dos hijas. En el accidente automovilístico fallecieron, el guitarrista, su pareja y la hija más pequeña de ambos.
Para la posteridad dejó dos de los temas más reconocidos y queridos por el público piojoso, “Gris” y “Sudestada”.
El reino del revés:
Ícono de la cultura nacional, autora de más de 50 libros y compositora de la gran mayoría de los himnos infantiles. María Elena Walsh fue mucho más que eso, fue un estandarte de la lucha por los Derechos Humanos.
Los últimos años fueron los más libres en la vida de Walsh, blanqueó su homosexualidad y se dedicó a escribir poesía. El 10 de enero falleció dejando un vacío en todos los que disfrutamos de su arte, por suerte ni con un millón de Sapos Pepes van a poder remplazarla.
Todavía tiene el blues:
Gary Moore integró varias bandas sin demasiado éxito antes de conseguir el reconocimiento mundial. Formó parte de Skid Row, banda homónima de la de heavy metal y precursora del nombre.
Como solista grabó más de un veintena de discos y logró once veces ubicarse en los primeros puestos del Top 40 de Reino Unido.
Falleció el 6 de febrero de un ataque al corazón con tan sólo 58 años.
Un juego perdido:
El 23 de julio Amy Winehouse pasó a integrar el Club de los 27. La artista británica varias veces coqueteó con la idea de su muerte, una vida de adicciones y escándalos predecían lo que sería su final.
Dueña de una voz única y un talento inigualable, Amy logró ser reconocida por los críticos más prestigiosos del mundo. Tan elogiada como reprochada conoció las dos caras del éxito.
En los 6 años que duró su carrera obtuvo un premio Mtv Awards como mejor artista y cinco premios Grammy por el disco “Back to Black”.
Después de ti:
Con 23 discos en sólo 16 años de carrera, Leo Mattioli tenía condiciones para formar parte de Rock ´N Ball. Si bien su género lejos estaba del rock que pregonamos en la web, sus actitudes rockeras le hicieron ganarse este homenaje.
El “León santafesino”, como lo apodaban, logró trascender las fronteras y los prejuicios de la música tropical. Entre su repertorio solía incluir canciones de grandes del rock nacional como Charly García, Luis Alberto Spinetta y Andrés Calamaro.
Varias veces opinó sobre cómo sería su muerte, e incluso llegó a despedirse con once años de anticipación en el tema “Le pido a Dios”.
Su deceso se produjo el 7 de agosto, minutos después de haber terminado un show en una discoteca de Necochea.
Hay gente de mierda y gente que no:
Horacio “Gamexane” Villafañe era de la segunda, incisivo y directo tanto arriba como abajo del escenario. Uno de los primeros punks que se mantuvo hasta los últimos días.
Solidario con otros grupos sin importar el estilo que hicieran, colaboró con varios artistas por el sólo hecho de darles una mano.
Supo tener varios proyectos y tres grandes bandas, Los Laxantes, Responsables No Inscriptos y la banda que le dio el reconocimiento, Todos Tus Muertos.
La infección de una hemorragia digestiva terminó con la vida de Horacio el 23 de noviembre. Lamentablemente su muerte se produjo ante la indiferencia de varios artistas que lograron ser reconocidos gracias a él.
Para demostrar que no todas fueron pálidas en este 2011 se murió el genocida tucumano Antonio Bussi. Aunque la muerte de un hijo de puta no recupera a los otros, por lo menos colabora para una sociedad un poco menos injusta.
Twitter: @bugallomatias
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