Grey’s Anatomy: radiografía de una serie que sigue vigente

Hay aspectos que permiten que Grey’s Anatomy, por ejemplo, el año pasado le haya ganado la competencia a series estreno, transitando ya su décimo tercer temporada. Motivos sobran para que suceda esto, y te los detallamos a continuación:

La música

Decir que se le da importancia en la serie es poco, la música en Grey’s Anatomy es clave. Tiene un peso propio y es utilizada como recurso dentro de la historia. Empezando por que los capítulos son nombrados a partir de canciones que tengan que ver con la trama que se va a contar, si, en las 13 temporadas cada capítulo tiene nombre de canción, y no, ese tema no suena dentro del mismo al que le da nombre, pero lo enmarca perfectamente.

Algo que quizás no saben muchos, Shonda Rhimes tiene encargados en sus áreas más importantes de la serie. En primera medida tiene una asistente que es médica, y que le cuenta con lujo de detalle cada procedimiento quirúrgico. Por si no lo saben, Grey’s es una serie de doctores, residentes de cirugía de todas las areas, pediatría, general, cardio, cerebral, y algunas más, y en todas las escenas en el quirófano hay un nivel de precisión y detalle increíbles, y todo se logra a partir de esta colaboradora, alguien muy importante en el equipo.

Y así como lo médico tiene alguien ayudando, lo musical tiene alguien similar, que es sonidista, y se encarga de descubrir artistas y bandas que muchas veces son desconocidos hasta el momento de sonar en la serie. Ese poder tiene el programa de Shonda, y bandas como The Fray, Snow Patrol, Keane, John Legend, entre otros, tuvieron una explosión a partir de su presencia como soundtrack de un capítulo. También se pueden escuchar artistas de Youtube que hayan hecho un cover que encaje con lo buscado. Porque todo está pensado, y el tema que suena en la escena se conecta con lo que se ve, lo que se dice y el contexto general del capítulo. Así de organizado es todo en Shondaland.

Los voiceovers

Otro gran aspecto que hace a la serie situada en Seattle distinta es la inclusión de Voiceovers. ¿Que son? La voz en off, un texto que se va escuchando en un capítulo al comienzo, y que concluye todo lo ocurrido cuando termina. La gran mayoría son con la voz de Ellen Pompeo, la genial Meredith Grey, protagonista central de la historia. Ellen lleva esta tarea acabo de manera fenomenal, y le imprime un toque único a la palabra dicha por su personaje. Destacar que los off utilizados son de una profundidad y verdad insoslayables, y que además de ser perfectos para cerrar el capítulo como un todo, dejan regulando al espectador muchas veces por su mensaje. Un toque distintivo y necesario para Grey’s Anatomy.

Si hablamos del argumento un punto muy alto es la historia de los pacientes. Esta serie de médicos es diferente porque focaliza mucho en lo que vienen a contar sus extras, la gran mayoría personas que deben atenderse en el Seattle Grace, y que tienen historias durísimas que mueven una fibra emocional casi inevitablemente. Generalmente, el capítulo que ya tiene su off, que se relaciona con la música y sus personajes fijos, cuenta la historia de 2 o 3 pacientes que tienen que ver con ese todo, y pueden estar relacionados entre sí, o bien ser lo diametralmente opuesto, con el objetivo de mostrar las dos caras de la temática. Así de meditado está todo, y así de placentero es ver toda la maquinaria que hace a un episodio de esta serie.

El último gran punto, y no por casualidad va al final, se da en los denominados season finale, el final de temporada. Un aspecto que es importante para todas las series,  pero que en Grey’s es algo a destacar aún más. Uno ve este show sabiendo que el final de temporada lo va a dejar mal, porque puede pasar cualquier cosa, y es una percepción real, porque sucede de todo. No es la intención spoilear, porque quizás esta nota hace que quieran ver la serie, por eso es que no habrá detalles de los sucesos e historias que se dieron en estos season finale. Pero hay que remarcar que todo lo contado anteriormente es potenciado al 1000 en esos eventos de final de temporada. Se tira toda la carne al asador, y los pacientes traen historias con un peso específico que impresiona. A su vez, los protagonistas viven el cierre de su historia de esa temporada, y les pasan muchas cosas, ya sea para dar fin o dejar abierto todo hasta el próximo Septiembre de estreno. Por todo esto, el contexto general del episodio tiene una distancia abismal con lo visto durante todo el año en materia argumental. Es una de esas cosas que te sentás a verlo y pasás por todos los estados. Resulta imposible no llorar con Grey’s Anatomy, no es suposición, es afirmación probada con hechos. Es una montaña rusa emocional, como es certeramente bautizada por sus propios protagonistas. El otro estado es incredulidad, no creer lo que se está viendo es un sentimiento muy común en los finales de este programa, y por último, admiración por como todo lo que se hace/ve/dice, tiene un motivo. Todo es por algo, y alimenta a la trama de una forma que si alguno de esos aspectos no existiera, sin dudas no sería la misma serie. Esa que lleva 13 años y sigue vigente más allá de sus personajes, porque Grey’s Anatomy es una historia completa y pensada para que lo que se cuenta sea accesorio a los personajes, y que éstos, todos interpetados por actores que saben tocar cada fibra dramática en su representación, y que logran que el público se encariñe con cada uno de ellos, se rindan ante el argumento y vean en lo contado la mayor fortaleza de la serie.

La serie de Shonda (y que ya es de todos sus fans también), vuelve el 22 de Septiembre. Falta muy poco, y aún después de tantos años la expectativa está intacta. Aún más sabiendo que la historia de esta temporada será centrada en los originales, los que comparten su historia con el público desde hace 13 años. Por la cantidad de años que lleva, el elenco ha sufrido cambios casi inevitablemente. Por eso, este foco en los de siempre, entusiasma al espectador que lo venía reclamando en las redes sociales. La realidad es que en algún momento terminará la creación de Shonda Rhimes, mientras tanto sólo queda disfrutar el viaje en esta montaña rusa de emociones.