Revanchistas se presentó en el barrio porteño del Abasto en una noche bien rockera para el delirio de sus fanáticos y para volver a marcar la potencia que poseen. Una jornada que no bajó el ritmo en un ningún momento y que tuvo a Uniclub al borde de su capacidad gritando los temas nuevos y los clásicos a la par.
La noche comenzó con Anacrusa poniéndole funk y reggae, música muy bien recibida por los presentes que iban ingresando al lugar y que se destacó por tener como corista a Barbie Cruz, quien supo dejar una huella en Viejas Locas con su voz inigualable. Luego de la banda soporte el lugar se volvió un manojo de ansiedad que aumentó cuando las luces se apagaron y sólo se leía “Revanchistas” en las pantallas a los costados del telón.
Con gran puntualidad comenzó el show con la apertura de cortinas y la proyección en la pantalla de un video con los miembros del grupo acompañados por frases sobre lo que significa la banda para ellos. En sintonía con las últimas imágenes vistas arrancó “Salimos jugando”, tema que le dio nombre a la fecha y que se adapta a la perfección con la filosofía de la banda de hermanar rock y fútbol, probablemente siendo el conjunto que mejor logra transmitirlo y bajarlo a su público.
Los problemas en el micrófono durante el primer tema no impidieron que Uniclub sea una fiesta desde el comienzo, y superado el inconveniente continuaron con “El árbol de la buena madera”. Fernando Bertuccio, voz y cuerpo pero también alma y corazón de Revanchistas, se dirigió por primera vez hacia la gente para presentar la canción que vendría al advertir que era “un tema que no solemos tocar mucho y nos gusta mucho, esperamos que a ustedes también” y así llegó “Cicatrices”, acompañado por “El santito” y “El buen vencedor”, primer pico de la noche con un pogo incesante.
Hubo tiempo para advertirles a los seguidores que “se van a tener que bancar una linda gira, vamos a tocar muy seguido” e indicar los carteles que avisaban fechas próximas en Temperley, Lomas del Mirador, Marquee y Niceto Club.
Muchos aplausos y mucha gente daban un gran marco para la noche que nunca bajó la intensidad, aún cuando habían comenzado con gran fuerza, que se volvió a demostrar en el pogo de “Bravío” y de “Menester”, plasmando una impronta revanchista en la sala. Los invitados fueron llegando al escenario primero con Toto Ghirardi y Mariano Zaba de Tranquilo Venancio para “Ponele” y luego con Nicolás de Malabares para “Revanchista“, que finalizó con línea de 4 al frente del escenario: Guido Villafañe, Nicolás Rossano, Ignacio Caram -guitarristas- y Diego Bassi -bajo- para ser la defensa sólida de una noche soñada.
La noche fue testigo de momentos que los fans atesorarán por mucho tiempo, como la dupla “Vuelta sin vueltas” y “Falsa bandera” donde Fercho lució toda su destreza de frontman primero cantando desde una escalera lateral para luego bajar al medio del público y cantar con sus seguidores e incluso abrir una ronda para hacer pogo. La esencia futbolera nunca está ausente en Revanchistas y es por eso que contaron cómo se prepararán para el show en el Marquee a pocos días del comienzo del Mundial Rusia 2018: camiseta argentina para toda la banda y apoyo para la selección de Messi y compañia.
No hubo respiro en toda la jornada y siempre que se amagó a parar un poco la velocidad fue sólo un tiempo para tomar aire y seguir, así lo demostró cerca del final la auténtica fiesta que armó la gente en el suelo y la banda en el escenario durante “Las malas lenguas”. El agradecimiento desde el grupo hacia sus seguidores era inocultable y se reiteró antes del cierre con la frase “una fecha difícil pero ustedes decidieron estar acá” como prólogo de los primeros acordes de “Sangre caliente”. Mención destacada a cada músico y miembros del staff, saludo final y fin de show para Revanchistas en un nuevo Uniclub explotado.
Cierre emotivo con el público coreando nuevamente “Falsa bandera” al momento de la foto clásica y la sensación de una noche que consolidó al grupo de Villa Luro en el circuito local y a base de buen rock y público fiel puede ilusionarse con un futuro formidable.
Fotos archivo: Sofi Vara
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