Se sabe que en el under porteño hay bandas de todo tipo. Ahora, que mezclen géneros, y encima de buen forma, no tantas. Eso fue lo que sucedió en la noche de ayer en el Club del Arte (Av. Corrientes 3439) donde se presentó El Limacoco.
En el medio de una ambiente muy particular, rodeado de antemano por música retro, una pantalla donde se proyectaban videos caseros, recitales y episodios de La Pantera Rosa, entre otros, arrancó el show. La banda ya tiene en su haber un disco homónimo editado en 2011 en forma independiente (que se puede descargar gratis en su página web), y otro más en camino. 
Sin embargo, fueron más temas nuevos los que presentaron antes que los conocidos en formato disco. La banda (Ramiro Álvarez en batería; Agustín Raubián en percusión; Verónica Bouza en saxo alto y coros; Nicolás Clein en guitarra y coros; Eduardo Pelitti en bajo y coros; y Martín Pelitti en voz, guitarra y teclados –también frontman de la banda) desarrolla un estilo propio muy particular. Se puede escuchar desde rock y pop, hasta funk y cumbia (bien hecha).
Las canciones que no tienen un riff potente se van desarrollando progresivamente y nunca pierden potencia. Otra característica particular es que sus letras (a cargo de Enzo Bolotnicoff) no conllevan una métrica regular, y por lo general hay mucha síncopa entre ambas; lo que no hace que la canción pierda su hilo –algo que no es fácil lograr.
Es así que en tanto la bandera “un Limacoco en el balcón” –frase de cabecera de su disco-, luces de ambulancia y un mini-maniquí negro con su remera los envolvía en un armado extraño, el recital devolvió temas nuevos, viejos, propios y ajenos, bien trabajados. La respuesta del público no sólo es inmediata, ya cuentan incluso con hinchada y cantito propio. Lo que en síntesis es una banda que cayó bien, pudo encajar correctamente en el Club del Arte y no decepcionó. Esperamos la próxima presentación.
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