Siglo XXI Muchachos…El presidente de Quilmes, Carlos Coloma calentó aún más la previa del ya hiper caliente Quilmes-River del próximo sábado a las 17 horas. ¿Qué pasó? El sucesor de la “joyita” de Juan Carlos Meiszner aseguró, sin tapujos, que su equipo le va a ganar al Millo. Hasta tiró resultado…
“River todavía no tuvo rivales en serio en los tres partidos que jugó en la B Nacional. El primero va a ser contra nosotros y no tengo dudas que le vamos a ganar fácil, por 3 a 0, ya que venimos de dos triunfos seguidos y estamos bien“. Así se despachó en Radio Télam.
¿Es tan así? “Somos un equipo armado y fuerte, todo lo contrario a River. No es por desmerecer a Chacarita, Independiente Rivadavia y Desamparados, pero ellos no son medida. Nosotros sí lo seremos“, vaticinó el hombre fuerte de la cerveza.
Ojo, también debió aclarar porque en su club no todo es color de rosas antes del gran partido, pero negó todo el temita de la deuda: “Es mentira. Sí es verdad que le debemos una parte de julio, pero arreglamos que pagaremos este viernes. La negativa a concentrarse es cierta, pero partió de una iniciativa del preparador físico Ariel Perticarari, quien se negó a que el grupo siguiera hospedándose en el mismo hotel que lo venía haciendo desde que empezó el torneo. Yo prefería ese por cábala, porque le ganamos a Almirante“, concluyó el “guapo” Coloma.
Es así, Quilmes plantea como algo más que un partido de fútbol. Todo lo empezó, cuando no, Caruso Lombardi, que aseguró que “River jugaba como un equipo de la B” y que “Quilmes le iba a hacer fuerza”, además de otras frases Caruso-Style.
El otro que vivirá un partido “especial” será el conductor del equipo de Matías Almeyda. A Alejandro “Chori” Domínguez lo quieren hacer a la parrilla en su ex club, donde nació futbolisticamente. Se espera un recibimiento hóstil. No sólo para el Chori también para todo River. “River va a sentir lo que es ser visitante de verdad”, aseguró el ex DT de Tigre.
Del lado del Millo, eso sí, no vuela una mosca. De la boca del único líder de la B Nacional aún no salió ninguna respuesta. Matías Almeyda no se prendió en el cruce que “propuso” Caruso y mucho menos los jugadores. Excepto Domínguez, que pidió que bajen los decibeles. Por su parte, las entradas para visitar el Centenario volaron. River tendrá una multitud apoyándolo y el mismo equipo, otra vez. ¿Alcanzará para contrarrestrar la espuma de la Cerveza?
¿Le servirá a Quilmes plantear el juego en este escenario? Van cuatro fechas muchachos…Aunque no parezca, el partido del sábado no define nada.
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