Quiero aclarar que soy un ser humano como cualquiera y que es muy difícil escribir en estas circunstancias. Genera bronca cuando un equipo hace todo lo que tiene que hacer para poder ganar y le falta esa pizca de suerte, y no sólo eso, sino que el encuentro fue fatal porque Vélez convirtió un gol sin merecerlo. Newell´s perdió 1 a 0 en Rosario contra los dirigidos por Ricardo Gareca por el partido de ida de octavos de final de la Copa Libertadores.
Se hizo todo pero no se pudo. Martino abrió la cancha por los dos costados y cuando los de Liniers presionaban en el medio las descargas salían por las puntas. Marcos Cáceres y Milton Casco se proyectaron como indicó el entrenador y como obliga el sistema. Newell´s pregonó la tenencia del balón con Hernán Villalba, Paulo Cruzado y Pablo Pérez a la cabeza. Ellos también cumplieron y abastecieron a los delanteros para que puedan tener ocasiones para convertir. Ignacio Scocco, que jugó infiltrado, tuvo una gran actuación y pudo haber anotado en varias oportunidades. Pero hoy no fue su noche y la de ninguno de los pibes del Tata.
A Vélez Sarsfield le salió todo bien. Federico Insúa demostró una vez más ser distinto y con un categórico enganche cambió el rumbo de la jugada y asistió a Agustín Allione para que marcara el único tanto del cotejo. Le salió todo lo planeado que hasta lo benefició en su planteo táctico haber tenido contusionados a Fernando Gago, Lucas Romero, Iván Bella y Facundo Ferreyra. A los dos primeros porque el Tigre estuvo obligado a meter a Francisco Cerro y sobre todo a Franco Razzotti, pues con ese doble cinco de marca obligaron al local a jugar más por afuera que por adentro y no se desprotegió defensivamente. Y a Allione lo tuvo que poner por Bella y fue quien convirtió. Por el Chucky entró Jonathan Copete que se instaló por izquierda formando un 4-4-1-1 con Pocho de enlace y Lucas Pratto como único punta. Ese sistema defensivo y contragolpeador le puso el éxito en una bandeja a Gareca y sus dirigidos.
En el segundo tiempo el fortín se adelantó un poco más y ahí fue cuando encontró la llave del triunfo que lo dejó excelentemente parado para el partido de vuelta. Los rosarinos intentaron los 90 minutos pero no encontraron la forma más efectiva para que la pelota finalizara adentro del arco de Sebastián Sosa.
El fútbol es el deporte más hermoso del mundo, en parte, porque es injusto infinidades de veces. Eso lo hace atractivo y genera que la sociedad desee verlo y que algunos lo tomen como un sacrilegio y de vida o muerte. Hoy fue una noche que Newell´s tiene que dejar atrás y olvidarla para poder mirar hacia adelante y entender que queda la revancha y que se puede revertir. Hoy podría declararse en nuestro país como el Día Nacional de la Injusticia.
Comentarios