Buscar, probar, inventar, siempre igual y con el mismo resultado, desde el retiro de Hugo Ibarra y la salida de Roncaglia al fútbol italiano en su mejor momento, Boca no supo como reemplazarlos, encontrar un lateral derecho es casi una utopía, prácticamente imposible por estos tiempos. Carlos Bianchi desde que llegó al club intentó con varios nombres, pero ninguno supo aprovechar la oportunidad brindada por el técnico.
Algunos de ellos son Cellay, Albin y Franco Sosa, ninguno pudo complacer al virrey ni a los hinchas. Al no poder encontrar respuestas en los de mayor edad, el entrenador debió buscar en las infantiles lo que no tenía en los de más experiencia, uno de esos pibes es Leandro Marin quien se merece un párrafo aparte por ser el único que supo cumplir su función de número 4 casi a la perfección.
Es joven, tiene que aprender mucho todavía, pero nadie puede negar que es el jugador ideal para esa posición, no hay otro y para que buscar afuera cuando lo tenes en tu casa. Va a crecer en un club que le brindará muchas posibilidades para su carrera, no será fácil, tal vez llegue en junio algún tipo importante, pero deberá superar esas cosas para seguir manteniendo su lugar en el equipo titular. Otro juvenil que vale la pena mencionar es quien será el reemplazo de Clemente Rodríguez a futuro, hablamos de Nahuel Zárate.
El derecho es categoría 92 y el izquierdo tiene un año menos. ¿Proyectos?, claro que si, ellos son el futuro de la institución, aunque sabemos que si mantienen su nivel, volarán rápido a Europa, no hay forma de parar eso, lamentablemente el fútbol argentino es así y nadie aprende nada. Leandro debutó en Boca el 12 de abril del 2010, reemplazando nada más ni nada menos que a un referente en el puesto y a quien ya nombramos anteriormente, el “negro” Ibarra. Fue victoria xeneize sobre Arsenal por 4 a 0.
Más allá que no se puede ser perfecto, ayer frente al Corinthians, Marin no tuvo errores y marcó a Emerson de manera segura impidiendo que una de las figuras brasileras no termine haciendo de las suyas como en la final del 2012, le tocó bailar con la más fea y no tuvo problemas defendiendo como tampoco las veces que se mandó al ataque. Tuvo experiencia en la Selección Argentina Sub 17 allá por el año 2009. Participó en el Sudamericano de Chile saliendo subcampeón y jugó el mundial de ese año en dicha categoría, pero los nuestros cayeron en octavos de final.
Definitivamente comienza a ser el lateral indiscutido para Bianchi. Le tiene que dar continuidad para que el chico se siga afianzando en el puesto y puede crecer cada día más, se tiene que sentir seguro, corregir errores, es ahora el momento de equivocarse y donde se te permiten dichas cosas, luego puede ser muy tarde. Con 21 años, Leandro Marin al igual que Zarate pueden sentirse privilegiados de tener un lugar en este plantel, el ojo de Carlos nuevamente se posa en los de abajo, ellos aprenden y crecen junto a él.
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