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Wimbledon, la gala del tenis

Arranca Wimbledon: análisis de un cuadro fácil para algunos y complicadísimo para otros. El final es incierto pero la promesa de buen espectáculo no quedará en deuda. Después de las dos semanas de preparación, instancia corta para una superficie tan difícil e incómoda para muchos jugadores del circuito, el tenis se viste de gala (de blanco y dorado, más precisamente) para recibir a Wimbledon. Hoy, La Catedral del Tenis abre sus puertas a los mejores del mundo. Los favoritos, los que pueden dar la sorpresa, y los que buscan asomarse en sus primeros Grand Slams. Un cuadro fácil para algunos, y complicadísimo para otros. Djokovic parece tener el camino allanado a los cuartos de final (debuta con Florian Mayer), donde se cruzaría con Berdych. Gasquet puede llegar a molestar, igual que Haas. Más abajo, Ferrer (inicia con Martín Alund) buscará demostrar que lo suyo no sólo es el polvo de ladrillo y que puede demostrar que es el “Quinto Beatle” también en césped. Su rival entre los mejores ocho sería nuestro Del Potro. El argentino arranca con Albert Ramos e intentará lograr que la medalla dorada en los Juegos Olímpicos del año pasado no haya sido casualidad. En el medio, a “Charly” Berlocq le espera una dura parada ante Milos Raonic (además: Zeballos-Giraldo y Mayer-Bedene). Del otro lado, choque de planetas: Nadal (comienza ante Darcis) y Federer (abre contra Hanescu en el primer turno de hoy en el Centre Court) parecen tener el camino allanado a su cruce. Se verían en cuartos. Ambos enfrentarán el Wimbledon más complicado de sus carreras: para ganarlo, deberán superarse, y hacerlo, hipotéticamente, ante Murray y Djokovic después. Suena a épico y heróico, palabras que los dos ya conocen. Pero no deja de ser muy difícil, hasta para ellos. Hewitt-Wawrinka promete ser un buen espectáculo también. El mencionado Andy quiere revancha luego de la final perdida en 2012. La presión de ser local aún le pesa y le molesta, pero se apoyará en el éxito de su medalla dorada para alivianar las cargas. Juega con Becker para empezar, y esperaría por Tsonga (Goffin en primera ronda). En este sector, “Pico” Mónaco tendrá como rival al alemán Knittel. Estos son los nombres, no hay más. Entre estos protagonistas estará la acción principal y sus definiciones. Creo que será un Wimbledon sin sorpresas, con los Top dominando. Es que las grandes batallas son para los grandes soldados. Y el All England Club promete ser anfitriona de una guerra tenística que no se olvidará jamás. Federer llega bien, luego de su sexto título en Halle, pero no como siempre. Ya no es el máximo favorito. Solo el respeto que impone lo coloca entre los candidatos. Hoy por hoy veo a Djokovic y Murray (campeón en Queen’s) un escalón arriba. Con Rafa será un duelo parejo, salvo que alguno de los dos no sea sólido en la primera semana. Al igual que en Roland Garros, Tsonga puede sorprender. Ferrer o Del Potro pueden escalar como nunca: de ellos dos sale el rival de “Nole” en semis. Sería un Wimbledon histórico para cualquiera de ellos, y seguramente lo será. Veo al argentino mejor que al español en esta superficie, pero el de Alicante está teniendo una enorme temporada. La gala comienza hoy. Vistámonos todos de blanco y dorado. Sentémonos a disfrutar del buen tenis. Arrancan las mejores dos semanas del calendario ATP. A celebrarlo. Y que gane el mejor.

Arranca Wimbledon: análisis de un cuadro fácil para algunos y complicadísimo para otros. El final es incierto pero la promesa de buen espectáculo no quedará en deuda.

Después de las dos semanas de preparación, instancia corta para una superficie tan difícil e incómoda para muchos jugadores del circuito, el tenis se viste de gala (de blanco y dorado, más precisamente) para recibir a Wimbledon. Hoy, La Catedral del Tenis abre sus puertas a los mejores del mundo. Los favoritos, los que pueden dar la sorpresa, y los que buscan asomarse en sus primeros Grand Slams.

Un cuadro fácil para algunos, y complicadísimo para otros. Djokovic parece tener el camino allanado a los cuartos de final (debuta con Florian Mayer), donde se cruzaría con Berdych. Gasquet puede llegar a molestar, igual que Haas. Más abajo, Ferrer (inicia con Martín Alund) buscará demostrar que lo suyo no sólo es el polvo de ladrillo y que puede demostrar que es el “Quinto Beatle” también en césped. Su rival entre los mejores ocho sería nuestro Del Potro. El argentino arranca con Albert Ramos e intentará lograr que la medalla dorada en los Juegos Olímpicos del año pasado no haya sido casualidad. En el medio, a “Charly” Berlocq le espera una dura parada ante Milos Raonic (además: Zeballos-Giraldo y Mayer-Bedene).

Del otro lado, choque de planetas: Nadal (comienza ante Darcis) y Federer (abre contra Hanescu en el primer turno de hoy en el Centre Court) parecen tener el camino allanado a su cruce. Se verían en cuartos. Ambos enfrentarán el Wimbledon más complicado de sus carreras: para ganarlo, deberán superarse, y hacerlo, hipotéticamente, ante Murray y Djokovic después. Suena a épico y heróico, palabras que los dos ya conocen. Pero no deja de ser muy difícil, hasta para ellos. Hewitt-Wawrinka promete ser un buen espectáculo también.

El mencionado Andy quiere revancha luego de la final perdida en 2012. La presión de ser local aún le pesa y le molesta, pero se apoyará en el éxito de su medalla dorada para alivianar las cargas. Juega con Becker para empezar, y esperaría por Tsonga (Goffin en primera ronda). En este sector, “Pico” Mónaco tendrá como rival al alemán Knittel.

Estos son los nombres, no hay más. Entre estos protagonistas estará la acción principal y sus definiciones. Creo que será un Wimbledon sin sorpresas, con los Top dominando. Es que las grandes batallas son para los grandes soldados. Y el All England Club promete ser anfitriona de una guerra tenística que no se olvidará jamás.

Federer llega bien, luego de su sexto título en Halle, pero no como siempre. Ya no es el máximo favorito. Solo el respeto que impone lo coloca entre los candidatos. Hoy por hoy veo a Djokovic y Murray (campeón en Queen’s) un escalón arriba. Con Rafa será un duelo parejo, salvo que alguno de los dos no sea sólido en la primera semana. Al igual que en Roland Garros, Tsonga puede sorprender. Ferrer o Del Potro pueden escalar como nunca: de ellos dos sale el rival de “Nole” en semis. Sería un Wimbledon histórico para cualquiera de ellos, y seguramente lo será. Veo al argentino mejor que al español en esta superficie, pero el de Alicante está teniendo una enorme temporada.

La gala comienza hoy. Vistámonos todos de blanco y dorado. Sentémonos a disfrutar del buen tenis. Arrancan las mejores dos semanas del calendario ATP. A celebrarlo. Y que gane el mejor.