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Brillará en su ausencia

Yelena Isinbayeva decidió dejar el atletismo, con el sabor amargo de no retirarse en Río como deseaba, pero con la certeza de que es historia viva del deporte mundial.

Russia's Yelena Isinbayeva celebrates after clearing the bar during the women's pole vault final at the 2013 IAAF World Championships at the Luzhniki stadium in Moscow on August 13, 2013. Isinbayeva won the gold medal. AFP PHOTO / FRANCK FIFE

Si en Argentina conocemos a la deportista Yelena Isinbayeva, es porque somos enfermos de los deportes y además porque es la mejor de todas. La garrochista rusa es una de las caras del atletismo mundial. Entre otros triunfos, es la dueña de la medalla de oro de Atenas 2004 y Beijing 2008.  La atleta anunció su retiro tras el boicot que sufrió Rusia, boicot que no le permitió participar de los Juegos Olímpicos de Río 2016. Fue la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo la que decidió la suspensión de todos los atletas rusos, sin excepciones, medida tomada a partir de los reiterados casos de dóping positivo. Claro está que si leemos entre líneas, si Rusia no participa, su archienemigo (Estados Unidos) festeja.

La atleta rusa superó 30 veces el récord mundial de salto en garrocha. Pavada de récord. En el año 2001, todavía competía en Junior, fue campeona Mundial. Saltó 4,40 metros. En el año 2003 ganó los campeonatos de Europa de pista cubierta. Además el 13 de julio de ese año superó el récord mundial, clavó 4,82 metros. En 2005 se transformó en la primera mujer de todos los tiempos en superar los cinco metros. Y ahí continua su récord intachable, 5,06 metros en el año 2009.

Yelena Isinbayeva fue declarada la mejor atleta en 2004, 2005 y 2008. Ganó el premio Laureus a mejor deportista femenina dos veces. Es una de las mejores deportistas en la historia de la disciplina sin lugar a dudas. En los Juegos Olímpicos de Londres 2012 obtuvo la medalla de bronce con un salto de 4,70 metros. El podio fue para Jennifer Sushr (Estados Unidos) y Yarisley Silva (Cuba). En 2013 el Mundial de Atletismo se disputó en Moscú e Isinbayeva se llevó el oro.

A modo de cierre de su carrera, la magnífica atleta rusa, se perfilaba y se entrenaba para los Juegos Olímpicos de Río 2016. Sin embargo se enteró que la delegación Rusa no participaría. No dudó en manifestar su enojo y su repudio. “Gracias por haber enterrado al atletismo”, expresó. Iba en busca de su cuarta medalla antes de retirarse,  pero finalmente no pudo competir. Además apuntó hacia la polémica: “Esto es puramente político”. Finalmente con 34 años y el récord mundial bajo el brazo, anunció su retiro definitivo. “Después del nacimiento de mi hijo, los Juegos de Río aun tenían sentido. He sacrificado tiempo que podría haber pasado con mi hijo. Me arrebataron el sueño”, declaró. La rusa dejará atrás una carrera plagada de éxitos. Sin embargo, no la tendremos fuera del deporte porque fue elegida por el Comité Olímpico Internacional para integrar la comisión de atletas. Por lo tanto mantendremos en el mundo aquellas estrellas que supieron brillar. Aunque titilen, y por momentos alguna mano negra las apague. Brillarán.