Hemos logrado tener un lugar para expresarnos dentro del fútbol

Todos estos años aprendimos que el feminismo no solo se reivindica en las calles, porque la lucha por la igualdad de derechos, la eliminación del techo de cristal y los estereotipos, entre otros reclamos, también se vilibilizan en los clubes de futbol poco a poco. Eso hace acercar la lucha, y refuerza la confianza y seguridad en nosotras mismas. Eso debe ser una prioridad y el deporte ayuda a empoderar a cualquier persona.

Llegamos con nuestro feminismo para darle jaque a la sociedad. Somos una sociedad futbolera, y por eso estos últimos años las mujeres que estamos en los clubes fuimos buscando nuestro espacio.

La formación en Velez Sarsfield del primer “Area de Violencia de Género” con su protocolo y una cláusula de violencia de género para todos los jugadores, vino a patear el tablero e instalar la necesidad de trabajar con y para estos reclamos sociales. Colocando quizás, muchas veces en aprieto a la dirigencia , quién deberá mostrar el compromiso y decisión política para poner la espalda y hacerse cargo de la responsabilidad social que tienen, ya que no son ni serán una SAD (Sociedad Anónima Deportiva).

Es justamente la llegada de Ricardo Centurión a Vélez, donde pudimos ser escuchadas y proponer una cláusula específica que se transformó en emblema. Y a partir de allí todos los jugadores que lleguen a la institución deberán firmar. Como también lo hizo Mauricio Pellegrino, el flamante técnico. Ello compromete a los jugadores a reconocer el Protocolo de Acción institucional ante situaciones de violencia de genero, abuso y acoso sexual, hostigamiento y discriminación, con las normas éticas y morales del club.

Pero nuestro trabajo se desvanece cuando es juntamente la dirigencia de algunos clubes la que no se hace cargo de esta realidad. Con su falta de acción, sin esta decisión política tan necesaria, siguen apañando a jugadores como el caso de Villa en Boca, con su presidente que en sus ultimas declaraciones no se hizo cargo de esta situación y hablo que el club no hace justicia.

¡No entendieron nada, cuánto trabajo aun falta!. Pasó con Cristaldo, con solo 5 días de suspensión , situaciones graves como Cardona y Barrios, acusados por abuso sexual de tres mujeres, Santos Borré, o Agustin Rossi que no pudo cerrar su transferencia a la MLS porque desde allí dicen haber advertido sus antecedentes. Solo para citar unos ejemplos.

Todo esto marca que tenemos que seguir por este camino . Es un momento histórico, y hemos logrado ser escuchadas por la sociedad en general y en los clubes de futbol, de una u otra forma, no importa cual, hemos logrado muy de a poco tener un lugar para expresarnos. Pero nuestras voces quedan acalladas cuando la dirigencia no se acomoda a la realidad y no pone lo que tiene que poner para evitar que los violentos sean los ídolos de nuestras niñas y niños que los ven desde la tribuna.

*Paula Ojeda es abogada, especialista en Violencia de género. Es la responsable del área de género de Vélez y una de las que armó el protocolo que el club tiene vigente desde el año 2018. También asesora a otros clubes en esa temática.