Le ponen banderas a Messi para pedirle que vuelva a Newell’s, recibieron a Martino en el aeropuerto, visitaron a Berizzo, Bielsa y ex jugadores del club. ¿Quiénes son? Se trata de un grupo de 100 hinchas de la Lepra que, a pesar de la distancia de vivir en Barcelona, no extinguen su amor. “La primera bandera la hicimos en enero del año pasado. Surgió tras el Mundial de Clubes vs River, para darle un apoyo a él y tirarle un palito para que vuelva a Newell’s. Este año estrenamos el nuevo trapo de la filial, que lo hicieron en Rosario”, contó Matías Bustos, presidente de la filial catalana de Ñuls, a Rock ‘N Ball.
10.500 kilómetros de distancia existen entre Rosario y Barcelona. Están enfermos, pero de lepra. Una pasión los unió, y ahora, especialmente, una misión: tentar a Lionel con regresar a su cuna. “Gracias a Dios lo tenemos acá, pero queremos que juegue unos años en Ñuls. Preferimos perder el tenerlo cerca y verlo con la de Newell’s. Seguro iremos para estar ahí”, afirman desde la peña. ¿Cuál es la reacción del público culé ante las banderas? “Muchos nos dicen ‘qué bueno, pero Messi se queda acá, no se puede ir porque ésta es su casa’. Pero lo dicen bien, entienden que Leo se vaya a Newell’s por amor, pero se disgustarían si va a otro equipo europeo”.
[su_box title=”Anécdota con Messi: charla y camiseta”]“Ejemplo de persona y jugador. Es reservado y tímido, no le gusta que lo halaguen, pero tiene detalles que te deja asombrado”. Así fue el caso de Sebastián, integrante de la filial, quien vivió una anécdota particular con Messi: trabajando en un puerto, se lo encontró y charló bastante con él. Después, fue a ver un Barcelona-Almería, le gritó a Leo y le mostró la remera de Ñuls. Al terminar el partido, éste fue y le regaló la camiseta que usó (video). [/su_box]
La filial. “Reunión entre hermanos”, significado mapuche de la palabra peña. La filial se oficializó el 7 de octubre de 2007 hacia el club, pero los hinchas leprosos en Barcelona se venían reuniendo desde 2003. Se fueron conociendo a través de amigos y contactos, cuando todavía no existían las redes sociales. Incluso publicaron anuncios en diarios. “Empezó en el restaurante de uno de los integrantes de la peña y hoy superamos las 100 personas”, describió Bustos, quien dejó Rosario en 2006 para probar suerte en España, donde se casó con una catalana, con la que tiene una hija, y trabaja como mozo.
Se juntan a ver los partidos del equipo de Maxi Rodríguez e Ignacio Scocco, y también hacen grandes asados. En el último, hubo 80 personas. Pero la actividad más trascendente de la filial es el agasajo a los leprosos que están en Barcelona y alrededores. “Cada vez que viene alguien, vamos a saludarlo y darle algún presente. Somos privilegiados. Estando acá, podemos hacer otras cosas que en Rosario serían difíciles, como hablar con Bielsa o Martino como si fuese un amigo de toda la vida”.
Con el flamante técnico del Lille, hubo un trato fluido: “Nos vimos seis veces y le entregamos una placa. No esperaba un trato así. Es tanto el fanatismo que da miedo que te ignore, y fue todo lo contrario. Hay que sacarse el sombrero”. El último encuentro con el Loco fue en el partido anterior a irse de Athletic. “Nos regaló entradas porque habíamos viajado 300 km, de Barcelona a Zaragoza, para verlo”, detalló Bustos.
Con Martino, fue similar. “Nos abrió las puertas de la Ciudad Deportiva del Barca y nos hizo ver un entrenamiento”. Previamente, la filial había ido al Aeropuerto y al club a recibir al Tata. Con Eduardo Berizzo, DT del sorprendente Celta de Vigo, también hubo vínculo: “Lo fuimos a ver al hotel. Nos dio el número de la habitación para que avisemos en recepción cuando llegásemos. Hablamos de historia y actualidad de Newell’s, y de Bielsa”. Hubo encuentros con otros ex leprosos que estuvieron en España: Hernán Bernardello (Almería), Leonardo Ponzio (Zaragoza), Justo Villar (Valladolid) y Santiago Vergini (Getafe).
A pesar de la distancia, los leprosos en Barcelona intentan tener una vida con detalles argentinos. “La carne argentina se encuentra pero es carísima. Lo que hay más económico son cortes argentinos, como tira de asado, vacío y matambre, pero de vacas españolas. Yerba, fernet y vinos, también hay. Alfajores y dulce de leche no, se hacen acá, de la misma calidad y gusto”. Allá, “es diferente; ni mejor, ni peor”, así lo describen. “Los catalanes son cerrados, reservados, incluso entre ellos mismos. Pero cuando le decís que sos de Argentina o de Rosario, te miran con otra cara. Hasta nos prestan carnets de socios para ir a la cancha”, y por eso se suelen ver banderas de Newell’s en el Camp Nou.
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