En un marco imponente, con las tribunas repeletas de gente y de pasión se enfrentaron Atlético de Rafaela y Newell’s Old Boys de Rosario. Terminó con los arcos en cero, pero hubo sobresaltos para ambos equipos y los arqueros fueron las figuras de los noventa minutos.
Todo comenzó con un predominio de balón y juego de parte del local. Durante los primeros treinta y cinco minutos de juego se mostraban seguros, bien parados y solidos en la defensa. Newell’s no podía hacer nada contra la presión a la que era sometido.
La lesión de Cristián Diaz, causó el ingreso del juvenil Guillermo Ferracutti. A partir de ahí el encuentro se volvió más parejo, los leprosos comenzaron a presionar más arriba y la defensa de la crema sufrió varias distracciones que pudieron haber terminado en gol. Los locales no veían la hora de que llegase el entretiempo para poder reordenar el equipo.
El segundo tiempo tuvo como característica principal el dominio de balón de parte de la visita que proponía juego, pero la falta de claridad, puntería y suerte les hizo imposible abrir el marcador. Sin embargo cada vez que Rafaela atacaba, generaba, ya sea de contra o con pelotazos cruzados.
El partido finalizó con los arcos en cero, pero sin lugar a dudas ambos equipos merecieron al menos anotar una vez. Las figuras del partido fueron ambos arqueros que taparon todo. El empate le sirve más a la crema que a los leprosos, que hicieron más por llevarse los tres puntos para rosario.
Un hincha más
En la tribuna visitante pudo verse al jugador con más partidos jugados. El “Tata” Martino se hizo presente para ver al equipo de sus amores, Newell’s, como suele hacerlo cada vez que sus compromisos se lo permiten.
Opinión
Ambos equipos tienen una idea clara de juego, saben que hacer con la pelota. Rafaela es más inconsistente y su defensa cae en la distracción y desorganización, sin embargo cuentan con un gran arquero para salvar las cosas cuando las papas queman. Newell’s en cambio, su principal problema se enfoca en la falta de claridad y puntería, se hace de la posesión del esférico, intenta tocar y generar, pero a la hora de definir las cosas se le ven negras. Otro gran problema que presenta el equipo rojinegro son las pelotas paradas, cada vez que cae un centro en el área de Peratta, los leprosos tiemblan; los arqueros no pueden salvarte en todas, alguna se les va a pasar.
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