No todo en las grandes cinco ligas europeas es despilfarrar dinero en talentos jóvenes o jugadores consagrados. O simplemente en algún que otro con ataque de habilidad en partidos consecutivos. Muchos millones de euros, pero pocos resultados deportivos que coronen semejantes gastos. Si bien cada entidad deportiva tiene diversos objetivos por el renombre e historia de la institución, es poco común encontrarse con que un club lleve casi dos años sin comprar algún jugador. Este es el caso del Athletic de Bilbao que desde el 30 de agosto de 2015 cuando abonó ocho millones de euros al Atlético de Madrid por Raúl García.
Este mercado de pases estará marcado por concretarse cuatro de los diez fichajes más caros de la historia, pudiendo ser cinco en las próximas horas. Los petrodólares del Paris Saint Germain dominaron todo lo (des)conocido. Pagó 222 millones de euros por Neymar (Barcelona) y está a punto de cerrar el arribo de Kylian Mbappé (Mónaco) por 180 millones, pudiendo llegar a ser 200 ‘palos’ de la moneda europea por el joven de 18 años. En las últimas horas Barcelona confirmó la contratación de Osumane Dembelé (Borussia Dortmund) por cerca de 150 millones de euros (105 corresponden al pase y poco más de 40 millones a variables). Otros de los que buscaron reforzar sus delanteras fueron el Manchester United y el Chelsea. El primero contrató al belga Romelu Lukaku por 85 millones de euros abonados al Everton inglés, y el segundo al español Álvaro Morata (Real Madrid) por 80 millones de euros.
Athletic intentó en este mercado de verano reforzar sus líneas sin poder llegar a concretar ninguna de sus negociaciones. El único cambio que hubo estuvo en quién es la voz de mando desde el banco. La salida de Ernesto Valverde al Barcelona obligó al presidente Josu Urrutia a buscar nuevo entrenador. El elegido fue el director técnico José Ángel Ziganda, quien estuvo dirigiendo el filial del club vasco durante seis temporadas.
Dos años sin incorporar jugadores al plantel profesional (siempre hablando desde otros equipos) no es poco. Desde que Urrutia ganó la presidencia en julio de 2011 sólo realizó trece fichajes. Sin embargo, la primera medida que tomó fue la contratación del director técnico argentino Marcelo Bielsa. Con el Loco la entidad bilbaína disputó dos finales en 2012: Copa Del Rey (derrota 3 a 0 ante el Barcelona) y su segunda final europea tras 35 años (UEFA Europa League), perdiéndola 3 a 0 contra el Atlético de Madrid.
En 2014 no le renovaron al rosarino y contrataron a Valverde. Con éste llegaron a una nueva final de Copa Del Rey (1-3 vs Barcelona). Por otra parte, lograron obtener la Supercopa de España al derrotar al conjunto catalán por 4 a 0 de local y empatando en uno de visitante.
Sin incorporaciones en los primeros seis meses presididos por Urrutia, los Leones salieron en busca de nuevos jugadores enero de 2012. El primero en arribar fue el goleador español Aritz Aduriz por tan sólo 2.5 millones de euros (noveno máximo goleador de la Europa League en la actualidad). En 2013 se vio el mayor movimiento para los vascos: cinco nuevas caras, entre ellas la de Beñat Etxebarria por nueve millones de euros desde el Betis y el defensor central Xabier Etxeita (hoy es el reemplazante de Yeray Álvarez afectado por un cáncer).
El buen trabajo en sus inferiores le es un juego propicio al Athletic Bilbao para no tener que acudir a un mercado externo. Muchos canteranos surgidos de Lezama (dónde se forman los juveniles) como Iker Muniaín, Iñaki Williams, Markel Susaeta, Óscar de Marcos o Aymeric Laporte le dieron sustento a la vigencia europea en los últimos años.
Por otro lado, supo vender en buen precio lo que adquirió por bajos costos. Dos casos dan cuentas de ellos. Javi Martínez llegó en 2006 proveniente de Osasuna por tan solo seis millones de euros a sus 17 años de edad. En agosto de 2012 se marchó al Bayern Munich que pago el monto de su cláusula de rescisión en 40 millones de la moneda europea. Ander Herrera llegó en febrero de 2011 a cambio de 8.500.000 de euros al Real Zaragoza y emigró al Manchester United haciendo uso de su cláusula de 36.000.000 de euros en junio de 2014.
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