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La noche que un afroamericano peleó por Donald Trump

La historia de la aparición del presidente de los Estados Unidos en el evento más convocante de WWE. La empresa llegará por primera vez a Argentina el 19 y 20 octubre.

Donald Trump brinda un discurso en Dimondale, Michigan a poco menos de tres meses de las elecciones presidenciales de los Estados Unidos. Las encuestas de agosto 2016 lo marcan con el pequeño porcentaje de 8% de votos de la raza afroamericana, entre las más optimistas para el candidato del Partido Republicano.  En la multitud predomina el número de blancos pero se refiere a  en busca de apoyo y lanza con aires de superioridad: “Están viviendo en la pobreza. Sus escuelas no son buenas. No tienen trabajo, ¿Qué demonios tienen que perder?”.

En el mismo Estado, a unos 150km del lugar donde se realizó el acto de campaña, se construyó el Estadio Ford Field. Allí, la noche del 1ro de abril de 2007, un afroamericano peleaba en nombre de un Donald Trump todavía lejos de una candidatura política. Bobby Lashley fue elegido por el propio millonario para combatir por él ante la mirada de 80.000 personas en el evento Wrestlemania 23, de la empresa más importante de lucha libre a nivel mundial: WWE.

Franklin Roberto Bobby Lashley tiene raíces latinas, aunque nació en Estados Unidos, ya que su madre es oriunda de Panamá.  Pasó cuatro años (04-08) en la compañía principal. Allí fue campeón de dos títulos: Estados Unidos y ECW, en dos ocasiones. También participó de la empresa de lucha TNA y en Bellator, en las artes marciales mixtas. El luchador fue consultado sobre Trump en la revista Sports Illustraded hace pocos meses, Lashley explicó: “Trabajé con él (Trump) en WrestleMania, así que cuando los medios comienzan a lanzar todas estas acusaciones contra él, puedo decirles que no era racista”.

Pelo por pelo. La pelea entre Donald Trump y Vince McMahon, dueño de WWE, fue en el formato de “Hair vs. Hair Match”. Consistía, básicamente, en que el perdedor debía ser rapado por el ganador, delante del Ford Field repleto. Se la denominó “La Batallas de los Billonarios” por lo que representaban ambos magnates y porque sonaba bien, claro está. La cabeza de la empresa eligió a Umaga, portador de un titulo de segunda línea en ese momento. Por el lado de Lashley, llevaba el cinturón de ECW. Ambos con perfiles de luchadores poderosos, con la fuerza como principal atributo, pero el americano contaba con una forma mucho más atlética.

En las semanas previas a Wrestlemania 23, se lo vio a Trump en rol de entretenimiento, aportando detalles al show y a la rivalidad con McMahon. Durante un programa semanal, llegó a hacer llover” dólares en la arena en la que se desarrollaba RAW, para ganar seguidores en el bando de face (buenos) vs. heel (malos). Llegó a empujar sobre una mesa ante las provocaciones y, durante la conferencia de prensa, golpeó a Vince delante de fotógrafos y periodistas.

La lucha duró unos 13 minutos y tuvo como árbitro al histórico Stone Cold Steve Austin que fue atacado por el luchador de McMahon. Bobby Lashley se llevó la victoria y con eso la cabellera del dueño de WWE. Luego de festejar junto a ambos luchadores, Trump se llevó un “Stunner” de Stone Cold, fiel a su estilo rebelde que el publico adoró. Más allá del combate, la amistad McMahon-Trump lleva años de duración.

El 8 de noviembre de 2016 Donald Trump ganó las elecciones de Estados Unidos y así se convirtió en el primer presidente en pertenecer al WWE Hall Of Fame. Fue inducido en la categoría 2013 debido a las apariciones que hizo en la empresa de lucha libre, entre las que incluyó al Trump Plaza albergando dos versiones de WM. Fue presentado por el propio Vince McMahon en la ceremonia previa a Wrestlemania 29 en el Metlife Stadium.

Durante febrero de 2017, toda la familia McMahon visitó la Casa Blanca. La comitiva incluía a Stephanie y Shane, hijos de Vince y actualmente Gerentes Generales de Raw y Smackdown!, respectivamente. También participó Triple H, luchador y esposo de Steph. Como no podía ser de otra manera, Linda McMahon, esposa del dueño de la empresa, fue parte del grupo familiar que tiene en común con el actual presidente de los Estados Unidos el Partido Republicano.

WWE llegará por primera vez a Argentina el 19 y 20 octubre con dos shows en el mítico Luna Park. Las entradas se agotaron rápidamente en ambas fechas, lo que anuncia que serán dos eventos históricos para la lucha libre en nuestro país. Participarán superestrellas de la talla de AJ Styles, Randy Orton, The Miz, Dean Ambrose y más personajes del extenso elenco de WWE.