Estamos haciendo bien nuestro trabajo”, repite varias veces Francisco Lago, cantante de Cruzando El Charco, a lo largo de la charla. Lejos de sonar presumido, el resumen del 2017 de su banda lo acompaña en sus dichos.  Un disco, festivales y nuevos escenarios son el triangulo que se destaca en los platenses que despedirán el año en La Trastienda el próximo viernes 15 de diciembre.

El sol que se reposa en la calle Lima golpea en las caras de Francisco Lago y Nahuel Piscitelli, voz y guitarra, respectivamente. Con la calma y la complicidad para charlar que puede ofrecer un bar casi vacio, logran abrir las puertas del mundo de Cruzando El Charco.

Rock And Ball: Vienen de agotar una Trastienda, lo que les permite hacer otra fecha en el mismo lugar, ¿cómo se sienten con eso?

Francisco Lago: Estamos muy contentos. La gente nos está acompañando. El show nace a raíz de una Trastienda agotada, pero es la cuarta fecha que hacemos ahí. Estamos con todas las pilas preparando el último show del año.

RNB: ¿Cómo manejan el estar a la altura en los lugares que se le abren a Cruzando El Charco que cada vez son más grandes?

FL: Todo eso trae una responsabilidad. Es muy gratificante porque nos hace dar cuenta que lo que venimos haciendo parece estar bien, no solo lo que reflejan las canciones en el disco sino también nuestra postura en escena, la gente lo ve y vuelve. Eso nos ha abierto las puertas de diferentes provincias y países como Uruguay. Son cuestiones que remarcan que estamos haciendo bien nuestro trabajo.

Nahuel Piscitelli: Uno siempre quiere hacer las cosas mejor de lo que ya lo hizo. El tema es que haya tanto feedback con la gente te obliga a que sea mejor, no hay excusa para que sea de la misma calidad. Es mejor o mejor. No vale ir para atrás.

RNB: ¿En los ensayos se nota eso? ¿Requiere más tiempo?

NP: Son más intensos, no sé si son más horas, son más específicos. Aprendimos a organizarnos un montón. La gira que hicimos en la presentación A Mil fue con algo que nunca habíamos hecho: un show armado de punta a punta en el cual solo se enrocaban ciertos temas que estaban en el banco para entrar como para ir variando el show. En esencia era el mismo show pero solo en la esencia porque después cada presentación tiene su vicisitud. Hay lugares donde hay cosas que se pueden hacer y lugares en que no, no todo es Vorterix, La Trastienda o Atenas. Lo que se prepara en la sala, se hace específicamente para una cuestión cuando antes era solo hacer una lista de temas.

RNB: Las bandas de La Plata, a diferencia de las nacidas en Capital Federal o algunas partes del Conurbano, suelen tener un nicho de público en La Plata y en Capital, que es lo básico, ¿sienten una ventaja en eso?

FL: Yo creo que banda es muy diferente. Conocemos bandas que han nacido en La Plata y les ha ido muy bien en Rosario, quizás no tanto en La Plata. Nosotros tenemos amigos en La Plata que les está yendo muy bien en todo el país. Nosotros tenemos nuestras cuatro o cinco ciudades donde nos va muy bien. El hecho de haber tocado tantos años en La Plata hizo que generemos un público que de a poquito empieza a acompañarnos.

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La guitarra que trae el cantante está guardada a pocos centímetros de su dueño. Cuidada por su funda con motivos de mapas y diferentes partes del mundo. Seis cuerdas y viajes: dos factores importantes en el crecimiento exponencial de Cruzando El Charco. Francisco Lago posee 191.000 seguidores en su cuenta de Instagram en la que postea diariamente canciones realizadas en distintas partes de su ciudad, de Capital Federal, de Argentina y del mundo. Muchas de ellas son de su banda pero también hay muchos covers que atraen un público nuevo y que esa pequeña interacción, en algunos de los casos, decanta en la música compuesta por la banda de la ciudad de las diagonales. Aunque el vocalista aclara: “Para muchos soy solo el loco que toca la viola en todos lados”.

RNB: ¿Qué rol tienen las redes sociales en el crecimiento que sigue teniendo la banda?

FL: A nosotros las redes sociales nos han dado una mano muy grande desde que las comenzamos a usar con criterio, desde hace un año y medio. Nos hicimos un Instagram, nos dimos cuenta de que era una herramienta de comunicación masiva entonces le metimos mucho a eso. También los temas tenían que estar en Spotify y YouTube y estar con el contenido actualizado diariamente.

RNB: ¿Y ustedes que uso le dan? Quizás Fran usa el Instagram para una cosa, el Twitter para otra…

FL: Siempre se trata de no cansar a la gente. Utilizar esos medios para mostrar que tengo una banda, se llama Cruzando El Charco y está activa todo el tiempo. Quizás hay mucha gente que no lo sabe y soy el loco que toca la viola en todos lados.

RNB: Tienen proyectos personales paralelos, ¿cómo hacen que se unan esos proyectos y Cruzando El Charco?

NP: Hay que tener en claro una sola cosa: Cruzando El Charco viene primero antes que cualquier cosa a título personal. Todo lo que ganemos en cuanto a experiencia, va a terminar nutriendo a la banda. Hay muchas canciones que no entran en el formato de Cruzando y a Fran le pasa lo mismo en un montón de aspectos. Todo lo que vayamos tomando de los lugares donde tocamos, donde grabamos y ese tipo de cuestiones, suman. Para nosotros está buenísimo porque somos plurales en la banda, si cada uno es plural y eso se concentra en un objetivo en común, ya está.

RNB: ¿Cómo saben cuáles van en el formato y cuáles no?

FL: Somos los dos compositores de la banda, tenemos estilos muy diferentes y la banda tiene un estilo ya definido. Nahuel cuando hace una canción se da cuenta cual es para la banda, vemos si hay que modificarla o directamente va para su proyecto paralelo. Intentamos mantener un estilo de la banda que nos guste a todos los que formamos Cruzando El Charco.

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Durante febrero Cruzando El Charco encontró la forma original e interactiva de lanzar A Mil en Capital Federal y La Plata. El 20 reunió a sus seguidores de su ciudad natal en la rockeria Jason y al otro día hizo lo propio en La Viola Bar, en el corazón de Palermo. Como si esto fuese poco, colmó el Microestadio Atenas y el Teatro Vorterix, que fueron de los puntos más altos de la gira de presentación del álbum.

RNB: Se los nota contentos cuando hablan de A Mil, ¿qué les pasa con el álbum?

FL: Es el disco que más puertas nos empezó a abrir. Lo trabajamos con Pepe Céspedes y Juan de Bersuit que son dos referentes. Además, entrar a grabar en Romaphonic que nunca habíamos estado en un estudio de ese nivel…

RNB: Otra de las cosas que te obligan a mejorar…

FL: Claramente. A la hora de ir a tocar en vivo, hay que ir a trabajar a la sala de otra manera una vez que vos sacaste un disco que suena de tal manera. La realidad te va llevando a trabajar cada vez más. El disco también tiene una cajita muy interesante que pudimos llevarla adelante, a pesar de que era costosa y rebuscada quisimos seguir adelante con nuestra idea de hacerla. Estamos muy orgullosos de A Mil.

RNB: ¿Tienen su canción favorita del disco?

FL: Cada una tiene lo suyo. La que más nos sentimos identificados algunos en la banda es “Viejo”, que habla de una persona que ya no está y atravesamos esa situación. El vivo se pone intenso y está bueno.

NP: “Terminales” o “Sobra La Esquina” que son una fiesta. Es otro tipo de disfrute también. Como canción en sí, me gusta mucho “Balas de magia”. Me parece que todo lo que sucede, todas las partes que hay, los cortes que tiene, los distintos cambios armónicos y demás, hace que la canción esté super equilibrada. Yo lo puedo escuchar dieciséis veces y no me voy a cansar nunca. Tiene la polenta, la tranquilidad y las palabras que tienen que tener.

RNB: Mencionan todo lo que tienen por hacer y son muchas cosas, ¿son de ponerse plazos para los trabajos?

NP: Si, todo a mil, realmente. Es todo ahora, ¿cuándo lo vas a hacer? Mañana te pisa un bondi y ya fue. Es ahora. Si estamos viviendo un sueño que creemos que pocos tienen la capacidad de vivir, lo vivimos ahora.

RNB: A Mil salió este año y ustedes ya están pensando despedirlo el año que viene…

NP: Ya estamos ensayando temas nuevos.

FL: Pasa que disfrutamos de todas las etapas de la música, no solo de estar en el vivo tocando. Para presentar A Mil, lo ensayamos un montón, salió y cuando la gente lo escuchó por primera vez, nosotros lo veníamos ensayando hace mucho. Algunos temas ya los tocás de memoria entonces le cambiás algún arreglito o algo. No hay nada más divertido que tocar temas nuevos, te hace ir más contento a la sala.

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La persiana de Cruzando El Charco se vuelve a subir en 2018 con rapidez y la esperanza de superar lo hecho en el corriente año. “No vale ir para atrás”, sentencia Nahuel Piscitelli, guitarrista, sobre la calidad de lo realizado a nivel producción y musical en las fechas previas. En los próximos kilómetros de la ruta del grupo aparece la apertura del show de No Te Va Gustar en La Plata, la segunda participación en el Rock en Baradero, una posible llegada al Cosquín Rock y otro Microestadio Atenas, como realizaron para presentar A Mil.

RNB: ¿Objetivo cercano pasando La Trastienda?

NP: Rock en Baradero, es la segunda que estamos en el festival. Una cosa es ir una vez y otra cosa es volver. En lo personal, en esta edición hay una oleada de música nueva que copó la grilla, sobre todo en el día que estamos nosotros y me parece fantástico. Hay muchas bandas muy buenas que están haciendo música que a mí me resulta nueva en principio y eso choca con Guasones, La 25, Kapanga que tienen muchos años.

RNB: Bandas que ya arman listas con hits…

NP: Podrían hacerlo ellos, lo nuestro es todo nuevo. Para ellos debe ser muy complicado armar una lista de 20 canciones, nosotros hacemos 20 porque capaz que son las únicas que tenemos de lo nuevo que somos. Hay otras bandas con menos años todavía y van a estar presentes ahí. Han llegado algunas noticias de que quizás nos vamos a Cosquín también pero todavía no se sabe. La idea es girar y seguir tocando. Cuando nos fuimos a Europa, salvando las giras, hacia cuatro años que no me iba de viaje a ningún lado y así quiero que sea siempre. Si yo tengo que irme cada cinco años a estar más de cinco días a algún lugar, que sea porque la banda está activa.

FL: Estamos definiendo bien la fecha de abril del Atenas apertura del año y ya despedida de A Mil. Pensando en entrar a grabar el nuevo disco, hay muchísimas cosas para hacer el año que viene.

RNB: Este año en el Rock en Baradero había mucha gente cantando sus canciones, ¿qué les pasa con eso?

FL: Es una felicidad como cuando la gente por la calle te reconoce el laburo y te saluda. Estar en un festival, ver que cada vez estás más cerca del horario principal, la gente canta más y más va por uno, son cosas gratificantes. Nos hacen dar cuenta que estamos haciendo bien las cosas.

Fotos de Cristian Sangermano