En Vivo

Attaque 77 y Rotman, ‘Siempreternos’

En la Fiesta Clandestina nuestra de cada día, un par de clásicos para brillar: El Siempreterno y Attaque 77. Todo lo que pasó, acá.

Attaque 77
Attaque 77

En la Fiesta Clandestina hacen esperar, pero una vez arrancado el espectáculo, el tiempo vuela. La cita obligada de cada mes en Groove (Av. Santa Fe 4389) tuvo como protagonistas esta vez a El Siempreterno y Attaque 77.

La banda liderada por Sergio Rotman comenzó pasadas la una y media de la mañana con un set bien power, rockero, movido. Suenan ‘El Siempreterno’ y ‘Más de lo mismo’ ¡Viejos son los trapos! –a pesar de que el señor de rulos se la pasó jodiendo con su edad (“yo conocí a las madres de los Attaque cuando eran vírgenes”). Sin embargo, el Cadillac no reniega de su pasado, e invita a Gigio González, ex Cienfuegos, a acompañar en la guitarra un par de temas.

Pero el otrora saxofonista –hoy guitarrista rítmico – no está solo: su compañera de banda y de vida, Mimí Maura, le hace un equilibrio y unos coros perfectos, con mucha actitud. Enternece ver el amor entre estas dos personas. Y del resto de la banda no sirve desatacar a uno en particular porque tanto bajo como guitarra y batería suenan igual de bien y ajustados. Quien espera algún cover de los Fabulosos, está perdido.

Siguiendo la línea punk, a la cancha salió Attaque 77. Si bien los muchachos aun se encuentran presentando parte de su material nuevo, directamente del EP “Triángulo de Fuerza” (2016), la excusa fue perfecta para repasar nuevamente una docena de clásicos de por aquí y por allá. Y por eso se escucharon los nuevos ‘Como Salvajes’ y ‘A Cielo Abierto’ pero también gemas desde ‘Ángeles Caídos’ y ‘Western’ hasta ‘Otras Canciones’ y ‘Donde las Águilas se Atreven’ pasando por ‘Santiago’, por ejemplo. Si bien al principio hubo un asunto con el sonido (desde el frente se escuchaba bajo la voz y guitarra principal), después todo se acomodó con normalidad.
Si el subtítulo de la Clandestina es “nada debería estar prohibido”, debiérase considerar el prohibido olvidar. Aquí vino la parte más interesante del show: como ya han hecho con los obreros de Zanón en otras ocasiones, por ejemplo, al escenario subieron trabajadores de AGR-Clarín para manifestar su reclamo contra los despidos en su empresa, que ya lleva más de 2 semanas tomada. De hecho, siempre hubo colgada de los parlantes una remera con la inscripción “No al cierre trucho de AGR”.

Punto aparte para la banda liderada por Mariano Martínez que destacó los ¡30 años! que ya lleva la banda consigo desde el primer ensayo. “Esta es la música que elegimos hacer”, reafirmó el cantante antes de la ovación general. Tiene lógica: lo nuevo sigue la dirección histórica de la banda en cuanto melódica y rítmica, y en pos de ir por más. Es que, tanto una como la otra, saben de lo que hablan cuando tocan su música. Y por eso ya se han ganado la placa de clásicos dentro del Rock Argentino.

Fotos de MakuRockerFotos  
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